PROPIEDADES DE LOS TEXTOS
Son elementos que determinan la eficacia del mensaje, es decir, que esté escrito correctamente, que tenga claridad y lógica, marcan el buen uso del lenguaje en el texto.
1. ADECUACIÓN:
Es la propiedad de aquellos textos que cumplen una serie de normas relacionadas con el RECEPTOR, el TEMA y la SITUACIÓN.
Se suele hablar de tres tipos de adecuación:
(1) Adecuación al destinatario. El texto debe adecuarse a sus receptores. Así, por ejemplo, para dirigirse a los niños, es necesario emplear un lenguaje fácil de entender.
(2) Adecuación al tema. En relación con el tema, es necesario no divagar y exponer lo que se dice objetivamente.
(3) Adecuación a la situación. Usualmente, el lenguaje se adecua a la situación comunicativa cambiando de registro: desde el que imponen situaciones informales en conversaciones amistosas hasta la formalidad de otras circunstancias, por ejemplo las que exigen el uso de expresiones de pésame.
1. ADECUACIÓN:
Es la propiedad de aquellos textos que cumplen una serie de normas relacionadas con el RECEPTOR, el TEMA y la SITUACIÓN.
Se suele hablar de tres tipos de adecuación:
(1) Adecuación al destinatario. El texto debe adecuarse a sus receptores. Así, por ejemplo, para dirigirse a los niños, es necesario emplear un lenguaje fácil de entender.
(2) Adecuación al tema. En relación con el tema, es necesario no divagar y exponer lo que se dice objetivamente.
(3) Adecuación a la situación. Usualmente, el lenguaje se adecua a la situación comunicativa cambiando de registro: desde el que imponen situaciones informales en conversaciones amistosas hasta la formalidad de otras circunstancias, por ejemplo las que exigen el uso de expresiones de pésame.
2. COHERENCIA:
Cualidad de los textos que hace que éstos puedan ser comprendidos como una unidad de sentido.
Poseen esta cualidad aquellos textos que cumplen estas cuatro condiciones:
(1) contienen la información necesaria para su correcto entendimiento;
(2) giran en torno a un tema, que, a su vez, puede ramificarse desarrollando diferentes subtemas;
(3) este tema se desarrolla progresivamente ―progresión temática―, de tal modo que las nuevas informaciones se apoyan en las anteriores;
(4) precisamente por ello encuentran internamente estructurados.
Cualidad de los textos que hace que éstos puedan ser comprendidos como una unidad de sentido.
Poseen esta cualidad aquellos textos que cumplen estas cuatro condiciones:
(1) contienen la información necesaria para su correcto entendimiento;
(2) giran en torno a un tema, que, a su vez, puede ramificarse desarrollando diferentes subtemas;
(3) este tema se desarrolla progresivamente ―progresión temática―, de tal modo que las nuevas informaciones se apoyan en las anteriores;
(4) precisamente por ello encuentran internamente estructurados.
3. COHESIÓN:
Cualidad que hace que un texto sea algo más que una serie de oraciones puestas unas detrás de otras; esto es, propiedad que propicia que el escrito sea percibido por el receptor como un todo trabado.
Para ello el autor se vale de una serie de recursos que se pueden agrupar en tres grandes apartados:
(1) Elementos idénticos o equivalentes que se repiten a lo largo del texto (palabras repetidas, vocablos de un mismo campo semántico o familia léxica, estructuras sintácticas idénticas,...).
(2) Palabras o elementos que han desaparecido y que han sido sustituidos por pronombres, adverbios o sinónimos (anáforas y catáforas).
(3) Marcadores textuales ―elementos que aportan información sobre la actitud del hablante [afortunadamente, francamente,...].
Y conectores ―palabras que indican el tipo de relación que se establece entre las distintas partes de un texto―: conectores de adición o sumativos (y, además, también, asimismo, encima, igualmente,...); de contraste u oposición (pero, sin embargo, aunque, a pesar de, no obstante, ahora bien, con todo, en cambio, aun así, por el contrario, de todos modos,...); de consecuencia o causa (porque, pues, entonces, por lo tanto, por consiguiente, ...); de sucesión temporal (después, más tarde, a continuación, más adelante,...); ordenadores del discurso (en primer lugar, para empezar; seguidamente, a continuación; para termina, por último).
Cualidad que hace que un texto sea algo más que una serie de oraciones puestas unas detrás de otras; esto es, propiedad que propicia que el escrito sea percibido por el receptor como un todo trabado.
Para ello el autor se vale de una serie de recursos que se pueden agrupar en tres grandes apartados:
(1) Elementos idénticos o equivalentes que se repiten a lo largo del texto (palabras repetidas, vocablos de un mismo campo semántico o familia léxica, estructuras sintácticas idénticas,...).
(2) Palabras o elementos que han desaparecido y que han sido sustituidos por pronombres, adverbios o sinónimos (anáforas y catáforas).
(3) Marcadores textuales ―elementos que aportan información sobre la actitud del hablante [afortunadamente, francamente,...].
Y conectores ―palabras que indican el tipo de relación que se establece entre las distintas partes de un texto―: conectores de adición o sumativos (y, además, también, asimismo, encima, igualmente,...); de contraste u oposición (pero, sin embargo, aunque, a pesar de, no obstante, ahora bien, con todo, en cambio, aun así, por el contrario, de todos modos,...); de consecuencia o causa (porque, pues, entonces, por lo tanto, por consiguiente, ...); de sucesión temporal (después, más tarde, a continuación, más adelante,...); ordenadores del discurso (en primer lugar, para empezar; seguidamente, a continuación; para termina, por último).
4. UNIDAD:
Es la cualidad de una obra e la que hay un único asunto o pensamiento principal, que funciona como generador de todo lo que ocurre, se dice o representa en la obra.
5. AUTONOMÍA:
Se refiere a la característica de que todo texto, debe tener vida propia e independiente, que no necesite de otros textos para darse a entender; que cuente con estructura: título, inicio, desarrollo y conclusiones.
Se refiere a la característica de que todo texto, debe tener vida propia e independiente, que no necesite de otros textos para darse a entender; que cuente con estructura: título, inicio, desarrollo y conclusiones.